Por Micaela Benegas

Finalmente se confirmó que el próximo 9 de julio se inscribirá en la provincia de Buenos Aires el Frente La Libertad Avanza con la incorporación de los principales actores del PRO en la jurisdicción más grande del país. Sin el nombre, sin el color y con más dudas que certezas, el partido amarillo parece quedar en una posición de extrema debilidad y surge un interrogante natural: ¿estamos ante la muerte del espacio que fundó Mauricio Macri o una posible resurrección?

Mientras la asamblea del PRO definirá las últimas condiciones del acuerdo con el gobierno nacional, lo cierto es que la Propuesta República que nació por el 2005 mutó definitivamente. Con el ex presidente fuera de la escena y con Cristian Ritondo y Diego Santilli como principales vías de comunicación con el gobierno nacional, la certeza que ni el nombre ni el color estarán en la boleta marcará un antes y un después en la vida del PRO.

En las últimas semanas, solo la intendente de Vicente Lopez, Soledad Martinez, resiste la avanzada violeta. La jefa comunal es la más cercana a Mauricio Macri y principal ladera de Jorge Macri y está convencida que no hay que ceder espacio ante el planteo del gobierno nacional. Incluso, su relación con el espacio libertario en el distrito es pésima y no se descarta que utilice otro camino para la elección del 7 de septiembre. Si le sale bien, será la resistencia macrista de acá en adelante. Si le sale mal, el PRO perderá no solo la boleta y el nombre sino que empezará a tener dudas sobre el primer municipio que conquistó en el 2011. 

Mientras Karina Milei celebra su avanzada sobre la provincia de Buenos Aires, el PRO plantea ceder la provincia capital pero cree que puede resistir en otros puntos del país. Parecería un error estratégico si uno analiza que viene de perder la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y que ahora cederá todo control en la provincia.

Pero no todo es lo que se ve en los medios y cerca de Macri plantean un escenario de incertidumbre. Los principales asesores le acercaron al ex presidente un muestreo donde la imagen del presidente está en retroceso, el programa económico tiene dudas y la centralidad en la provincia la recuperó el peronismo. Frente a esto, es que el propio Macri fue quien habría aceptado las condiciones de nombre y color para no ser parte de una eventual derrota.

Si se pierde en la provincia en septiembre y en octubre con el nombre de la Libertad Avanza la reconstrucción del PRO es lineal y a toda velocidad. La situación es de Ave Fénix”, fue una de las frases que manifestaron en el último encuentro en el quincho de un ex funcionario macrista y la cual impactó a más de uno por la lectura en el análisis.

Jugada de muerte o resurrección. Resultado incierto. Futuro indescifrable. Pero la expectativa es que una derrota o una victoria del Frente La Libertad Avanza cambiará el esquema político de una vez y para siempre. Con un Mauricio Macri expectante y con un Javier Milei que se juega más que un resultado electoral.

*Licenciada en Comunicación Social UBA - Redacción Noticias Argentinas