Lo que parecía ser otro revés legislativo se transformó en alivio para el gobierno. En la sesión de hoy se trató una modificación a la Ley 26.122, que regula el régimen legal de los decretos de necesidad y urgencia, sancionada durante el gobierno de Néstor Kirchner.

Uno de los cambios más controvertidos figura en el artículo 3, que establece que el Congreso dispondrá de 90 días corridos para pronunciarse sobre la validez de los DNU. Si no lo hace, quedarán sin efecto.

La modificación también exige que ambas cámaras aprueben el decreto para que este esté vigente, por lo que una minoría legislativa como la que posee el gobierno de Milei le impediría utilizar estos instrumentos.

Debido a que la oposición pretendía realizar esta modificación en medio de un mandato, algunos diputados propusieron una alternativa para que empiece a regir en 2027, aunque no prosperó.

Por lo tanto, los diputados procedieron a votar las modificaciones realizadas a la ley por el Senado, y fueron aprobadas de manera general con 140 votos afirmativos, 80 negativos y 17 abstenciones. Las abstenciones provinieron en su mayoría de la Unión Cívica Radical (UCR).

El Gobierno logró postergar la aprobación de la ley que regula los DNU

Al momento de votar los artículos en particular, el mencionado artículo 3 fue el que marcó diferencias, ya que obtuvo 127 votos a favor y no consiguió la mayoría necesaria (129) para ser aprobado.

Es por esto que la iniciativa volverá al Senado, lo que permite al gobierno evitar una derrota en el Congreso previo a los comicios de finales de mes.