Este año electoral parecía ser una oportunidad para que el PRO renueve su oferta y mantenga su base electoral, para llegar con aspiraciones a las elecciones bonaerenses, en las que inevitablemente debería negociar con La Libertad Avanza. Sin embargo, esa posición se debilitó de gran manera con los comicios porteños del 18 de mayo.

La decisión de desdoblar pareció beneficiar a muchos oficialismos a lo largo del país. Sin embargo, no fue el caso del gobierno de Jorge Macri. Un tercer lugar en la Ciudad, luego de más de 15 años de dominio ininterrumpido, fue un fracaso que dejó muchas consecuencias dentro del espacio que lidera Mauricio Macri.

Además de la esperada salida de Patricia Bullrich, quien se afilió a LLA, muchos dirigentes amarillos reforzaron sus intenciones de unirse con los libertarios. Este es el caso de Cristian Ritondo, Diego Santilli, Rogelio Frigerio o Guillermo Montenegro, entre otros.

Sin embargo, también existe otro grupo que aboga por marcar una posición propia, entre el kirchnerismo y el mileísmo. Es decir, romper uno de los grandes sostenes de la gobernabilidad libertaria: los votos incondicionales del PRO en el Congreso. Esta división se comenzó a ver hace unas semanas, cuando nueve diputados amarillos se abstuvieron de votar en el aumento de emergencia para los jubilados. Entre quienes desobedecieron a Ritondo se encontraron María Eugenia Vidal, Silvia Lospennato y Luciano Laspina, entre otros.

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X de María Eugenia Vidal

En este posteo, Vidal resalta el trabajo de los “ñoños republicanos”, una frase que utilizó Milei de manera despectiva para describir a quienes critican sus formas. Se podría decir que los “ñoños republicanos” son este sector del PRO, que quiere desmarcarse de la fusión con Milei, para proponer algo distinto a las dos principales fuerzas en caudal de votos.

A pesar de esta situación, el acuerdo entre ambas fuerzas parecerá seguir en pie. Podrán converger en la provincia de Buenos Aires, en Entre Ríos, o Chubut y La Pampa. Vidal, jefa de campaña de la fallida elección en la Ciudad, se vislumbra como una posible candidata a senadora nacional en octubre, por la ciudad de Buenos Aires. La relación de Milei con Jorge Macri alcanzó su punto máximo de tensión cuando el mandatario le negó el saludo al jefe de gobierno, por lo que es difícil que ambos se unan en octubre.

La próxima prueba parlamentaria para ver el alineamiento entre ambas fuerzas se dará en el Senado, con el proyecto que pretende darle un aumento de emergencia a los jubilados. ¿Seguirá la unión a pesar de las internas en el PRO? ¿O comenzaremos a ver señales más fuertes de una ruptura?