En medio de un clima político marcado por tensiones entre el oficialismo y la oposición, el presidente de la Bolsa de Comercio de Buenos Aires, Adelmo Gabbi, expresó un respaldo matizado al rumbo económico del gobierno de Javier Milei. Si bien reconoció logros clave como el superávit fiscal y la estabilidad del dólar, también advirtió sobre la necesidad de revisar ciertos estilos de gestión y cuestionó las dificultades del sistema previsional. Sus declaraciones se dieron durante el acto por un nuevo aniversario de la Bolsa, que contó con la presencia del propio presidente.

Durante ese mismo evento, Milei anunció que vetará el reciente aumento a las jubilaciones aprobado en el Congreso, argumentando que el desfasaje fiscal derivado de la medida “sería una mancha en dos meses” y que, de ser necesario, recurrirán a la justicia para frenarla.

Gabbi valoró la orientación de la política económica oficial, considerándola “el camino correcto”, pero insistió en que tanto “las formas como los ritmos” deberían adecuarse. "El presidente ganó las elecciones de esta forma, y seguramente estará encarando la campaña electoral de la misma forma que encaró la anterior", explicó desde radio Con Vos.

Superávit fiscal y jubilaciones: pilares del debate

El dirigente bursátil elogió la estrategia fiscal del Gobierno: “Prefiero un presidente que cuide la caja y defienda el equilibrio presupuestario como base para reducir impuestos, mejorar la competitividad y aliviar la presión sobre diversos sectores sociales".

No obstante, reconoció la urgencia de actualizar los haberes jubilatorios, aunque advirtió que su financiamiento enfrenta serias limitaciones debido a fallas estructurales en el sistema previsional. Relató su propia experiencia: tras 45 años de contribuciones, sólo percibe el haber mínimo. Gobiernos anteriores, desde Menem hasta Milei, han tenido que vetar incrementos por la falta de recursos. Según él, el problema radica en el sistema, no en la voluntad de los mandatarios.

En su análisis, remarcó que el gasto previsional elimina el superávit fiscal y fuerza el retorno a la emisión monetaria, lo cual “es la mayor estafa a los trabajadores”, ya que con la inflación los más beneficiados suelen ser los empresarios que ajustan precios.

Indicadores positivos: bonos, dólar y Bolsa

Gabbi subrayó avances macroeconómicos: el Estado logró pagar bonos clave durante la semana, el dólar se mantiene por debajo de sus valores de hace un año a pesar de recientes subas, y la Bolsa se encuentra por encima de los niveles registrados hace doce meses.

Con 81 años de trayectoria en la conducción de la BCBA, recordó episodios similares en distintas administraciones. Afirmó que la elevada carga impositiva ha limitado la competitividad nacional, y destacó que alcanzar un superávit fiscal significa distanciarse de una inflación que considera perjudicial para la clase trabajadora.

Un momento del evento fue cuando el público vitoreó “Viva la Libertad, carajo” junto a Milei. En ese instante, Gabbi optó por no repetir el grito, aunque aclaró sentirse “amante de la libertad en todos los sentidos”.

Adelmo Gabbi lanzó un mensaje equilibrado: ratificó su respaldo a la estrategia macroeconómica de Milei —centrada en la disciplina fiscal, la reducción de impuestos y el fortalecimiento del superávit—, pero también instó a una revisión de los estilos de gobierno y los tiempos de gestión. Reivindicó la actualización de las jubilaciones, aunque subrayó que hoy el sistema no garantiza su financiamiento. Concluyó destacando los indicadores económicos recientes y reivindicando una defensa rigurosa de la libertad, sin recurrir a consignas extremas.