La Cámara de Diputados cerró este martes una sesión especial cargada de tensión con un cruce verbal que rozó la violencia física. Las diputadas de Unión por la Patria, Florencia Carignano y Paula Penacca, confrontaron duramente al libertario José Luis Espert, a quien acusaron de bloquear el tratamiento de proyectos clave para el financiamiento universitario y la declaración de emergencia del Hospital Garrahan. El episodio también involucró a la diputada Juliana Santillán, del mismo espacio que Espert.

El recinto estalló tras más de cinco horas de debate en las que la oposición impulsó el abordaje inmediato de iniciativas resistidas por el oficialismo. La estrategia parlamentaria de Unión por la Patria y otros bloques opositores buscaba discutir “sobre tablas” la situación presupuestaria de las universidades nacionales y del Garrahan, pero al no contar con los dos tercios necesarios, no lograron avanzar en ese sentido.

Sí lograron, en cambio, emplazar a las comisiones de Presupuesto y Salud a tratar ambos temas el próximo martes 8 de julio. El oficialismo intentó resistir la maniobra, dado que abrir esos debates podría comprometer el objetivo de equilibrio fiscal que defiende el Ejecutivo.

X de Javier Milei

En ese marco, el clima se volvió irrespirable. Desde las bancas del kirchnerismo, los reproches a Espert —presidente de la Comisión de Presupuesto— se hicieron cada vez más intensos. Hacia el final de la sesión, Carignano y Penacca cruzaron el recinto para increparlo directamente. “Cagón, psicópata, mandás a la Justicia”, se escucha decir a Carignano en un video que circuló luego del incidente. La escena incluyó gritos, empujones y un fuerte intercambio con Santillán, que también se involucró en la confrontación.

El escándalo marcó el cierre de una jornada en la que el Congreso volvió a reflejar, en carne viva, la tensión política que atraviesa al país: una oposición decidida a instalar agenda social frente a un oficialismo que se repliega detrás del ajuste y el cumplimiento del déficit cero.