Trump: "Estos países me llaman para besarme el culo; se mueren por hacer un acuerdo comercial"
El presidente de los Estados Unidos se burló de los países golpeados por los aranceles. Además, aseguró que el país norteamericano está recibiendo 2.000 millones de dólares diarios en aranceles.
- Donald Trump se burla de los países afectados por los aranceles, afirmando que están desesperados por un acuerdo comercial.
- Durante un discurso en una cena del Comité Nacional Republicano, Trump imitó a líderes de otros países pidiendo acuerdos.
- Trump afirmó que Estados Unidos está recibiendo 2.000 millones de dólares diarios en aranceles.
- Los aranceles a las importaciones varían entre el 11% y el 50%, alcanzando hasta el 104% en productos de China.
- El presidente expresó que su gobierno no tiene prisa por alcanzar acuerdos comerciales, ya que están satisfechos con la situación actual.
- Criticó a legisladores que se opusieron a los aranceles, considerándolos un éxito que posiciona a EE.UU. favorablemente en el mercado mundial.
- Aseguró que la política arancelaria ha incentivado a empresas a establecerse en Estados Unidos.
El martes por la noche, Donald Trump se burló de los países golpeados por los aranceles y mencionó que estos están desesperados por lograr un acuerdo preferencial. "Estos países me llaman para besarme el culo, se mueren por hacer un acuerdo comercial", dijo. Tratando de hacer reír a sus seguidores presentes, el presidente imitó en tono burlón a los presidentes que lo están llamando con el fin de lograr un acuerdo. “Por favor, señor, morimos por cerrar un acuerdo. Haremos lo que sea, señor”, decía, ridiculizando a sus pares de otros países.
El discurso ocurrió en una cena de gala del Comité Nacional Republicano (NRCC) en Washington, donde Trump mencionó el supuesto éxito de los aranceles a las importaciones, que oscilan entre el 11% y el 50% para la mayoría de los socios comerciales. Además, en el caso del principal competidor comercial, China, los aranceles alcanzan un 104% dependiendo del producto.
Sus palabras transmitían una sensación de superioridad ante los países perjudicados por esta medida. Según Trump, estos países “se mueren” por lograr un acuerdo preferencial y que se reduzcan sus aranceles, pero remarcó que su gobierno no está apurado en alcanzarlos.
“No queremos necesariamente hacer un acuerdo con ellos. Estamos contentos de estar así, tomando nuestros 2.000 millones de dólares al día, pero ellos quieren hacer un acuerdo con nosotros”, dijo Trump mientras una multitud lo ovacionaba.
El presidente de Estados Unidos aprovechó su momento para criticar a legisladores compatriotas que estuvieron en contra de los aranceles. Mencionó que la medida fue un éxito y posicionó al país norteamericano con gran ventaja en el mercado mundial.
Además, Trump aseguró que esta medida obligó a empresas a establecerse en los Estados Unidos. “Este es un gran momento para mudar su compañía a EE.UU., como lo están haciendo Apple y muchas otras en cantidades récord”, escribió en su propia plataforma Truth Social.
Esta política arancelaria marca un nuevo inicio en el comercio internacional. Estados Unidos, promotor del libre comercio, ahora es un país proteccionista. Las reglas de juego han cambiado.