Desde sus primeras apariciones públicas, hubo un elemento persistente e innegociable en Javier Milei: su manera de comunicar. Su discurso se mantuvo desde sus participaciones en los paneles de televisión, en la Cámara de Diputados, llegando a ocupar el cargo de presidente. A pesar de los cuestionamientos externos, esto es algo que no se modifica en su accionar. De hecho, lo sostiene en sus posteos en X.

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X de Javier Milei

En este contexto, el Observatorio de Psicología Social Aplicada de la Facultad de Psicología de la Universidad de Buenos Aires (UBA) realizó una encuesta sobre el estilo comunicacional de Milei. Relevó 1.745 casos en la ciudad y provincia de Buenos Aires, dos de las regiones en donde más rechazo tiene el presidente.

En el inicio del estudio, se le pide a los encuestados que definan con una palabra el estilo comunicacional de Milei. El 71% hizo uso de palabras negativas, mientras que hubo un 27% de palabras positivas y solo un 2% calificado como "neutral". Un gran porcentaje de los votantes de Massa lo calificó como "violento", "agresivo" e "irrespetuoso", entre otras descripciones. Del otro lado, el votante de Milei calificó a su estilo como "sincero", "frontal" y "enérgico".

En otro apartado, un 65% de los encuestados contestó que "no le gusta nada" el estilo comunicacional de Milei, mientras que un 19% contestó "me gusta algo" y un 16%, "me gusta mucho".

Al dividirse entre quienes votaron a Milei y a Massa en el balotaje de 2023, el 97% de quienes eligieron al exministro de Economía respondieron: “No me gusta nada”. Entre los votantes de Milei, el 37% respondió: “Me gusta algo”; el 33%, “Me gusta mucho”; y el 30%, “No me gusta nada.

El estudio también le entregó tres afirmaciones a los encuestados. Entre los votantes de Milei, el 54% está muy de acuerdo con la afirmación: “El estilo comunicacional de Milei, por su grado de violencia y descalificación, no le hace bien a la democracia”. Las otras dos afirmaciones tienen porcentajes más divididos. El 24% está muy de acuerdo y el 35% está de acuerdo con: El estilo comunicacional de Milei se extremó demasiado y debería moderarse. Por último, ante la frase: “El estilo comunicacional fuerte y decidido de Milei era necesario para enfrentar al kirchnerismo, no se podía ser tibio”, el 22% de los votantes de Milei está muy de acuerdo y el 25% está de acuerdo.

Esto resulta interesante de analizar, ya que existiría dentro de quienes eligen al presidente un grupo que no está de acuerdo con su manera de expresarse, pero que lo sigue apoyando debido a sus resultados.

En el caso de quienes eligieron a Massa en 2023, sus porcentajes son más homogéneos, ya que casi la totalidad está en desacuerdo con la manera de expresarse del presidente.

¿Son sostenibles las formas de Milei?

En la conclusión del estudio, se advierte que la manera de comunicar del presidente podría estar sostenida solo por sus buenos resultados económicos. Si estas condiciones cambiarán, ¿qué pasaría con su imagen?

“La cuestión que se abre hacia el futuro es si la agresividad que hoy se tolera -o incluso se justifica- entre sus votantes podrá mantenerse como un recurso eficaz si se modifican los factores de anclaje que sostienen su adhesión. El riesgo latente es que, en caso de que se deterioren dichas variables, el discurso violento, ofensivo y generalizado no encuentre un sostén suficiente en la percepción de eficacia económica y se precipite un desgaste acelerado de su imagen”, indica el OPSA en el cierre del relevamiento.