En una jornada electoral clave, Salta reafirmó su respaldo al oficialismo provincial liderado por el gobernador Gustavo Sáenz, quien, mediante una estrategia de alianzas múltiples, logró una victoria contundente. Las listas que conforman los frentes Unidad de los Salteños, Unidos Salta y Vamos Salta se quedaron con 11 de las 12 bancas en juego para el Senado provincial y 20 de las 30 bancas en la Cámara de Diputados, consolidando así una mayoría sólida en la Legislatura.

Uno de los datos salientes de la elección fue el avance de La Libertad Avanza, que se posicionó como la segunda fuerza en varios distritos. En la capital salteña, el espacio obtuvo un triunfo significativo con la elección de Roque Cornejo como senador, y la conquista de nueve bancas de diputados provinciales (seis en Capital, una en Metán, Orán y San Martín), confirmando el crecimiento del espacio libertario también a nivel subnacional.

En contraste, el kirchnerismo sufrió una fuerte derrota: el Frente Justicialista Salteño, que nucleaba a referentes como Sergio Leavy y Emiliano Estrada, no logró obtener representación legislativa. Esta pérdida de presencia marca un retroceso político del sector en la provincia, en un escenario cada vez más polarizado entre el oficialismo saencista y las nuevas expresiones emergentes.